Centro
de Estudios para la Democracia Proactiva
Guía de
trabajo para la conformación social de la oposición cubana en la
comunidad.
La oposición tiene que ser un sentimiento de
oposición al régimen. Si partimos de ese principio, todo el que no
está de acuerdo con el régimen cubano está del lado correcto de la
historia, que es nuestro lado y tenemos que desmarcar nuestro
territorio. Por tanto, no se puede ver la oposición como algo
tangible, como las estructuras organizacionales, sino como la
política que rija a la ciudadanía dentro de un comportamiento
democrático.
En este contexto, teniendo en cuenta el
comportamiento práctico del régimen durante décadas, empezando con
los fusilamientos, las confiscaciones de las propiedades, la
persecución política y los encarcelamientos, el sometimiento al
sufrimiento extremo por falta alimentos, medicamentos, servicios
básicos como el agua, la electricidad, el transporte, etc.
Ante
todas estas atrocidades el que albergue un sentimiento contra el
régimen debe ser reconocido socialmente como una persona honorable.
Sin embargo, la sociedad fue hábilmente manipulada por el régimen
para crear un sentimiento adverso contra todo el que se le opusiera y
los llenaban de calificativos negativos y peyorativos como el
socorrido: “contrarrevolucionario”.
Nos toca reconstruir
el tejido social y revertir ese sentimiento de odio que nos
impusieron, ahora contra el régimen, que fue quien no los impuso y
lograr para nosotros, los iguales, ese sentimiento de solidaridad
humana que nos hace falta para liberarnos de todo el daño
espiritual, emocional y psicológico que tanto nos afecta. Al
extremo, que nos aislamos y abandonamos a nuestros hermanos de lucha
que caen en desgracia por la represión del régimen.
Nos
vamos del país y nos olvidamos de los que dejamos atrás y cuando
regresamos nos comportamos muchas veces como desconocidos ante
nuestros propios hermanos de lucha. Incluso, en un mismo pueblo, los
opositores, disidentes y descontentos con el régimen, ni siquiera se
conocen entre sí.
Por todas las razones antes expuestas
elaboramos esta Guía Metodológica para definir una línea de acción
y comportamiento que determine una actitud opositora humanamente
consecuente, confiable y pueda aportar los mejores ciudadanos para
que guíen el futuro de nuestro país. En este momento no contamos
con el personal identificado y aceptado por su comunidad para
reemplazar a los representantes del régimen actual.
GuíaMetodológica:
1-.Todo el que experimente ese sentimiento
en contra del régimen que empiece a llevarle la buena nueva a todos
los demás. Así como convertirse en el pastor político de su
alrededor y comunidad, para ello, necesita agenciarse del valor
cívico y depurar todos los prejuicios existentes, de ver la
represión en todo y pensar que por todo será encarcelado, lo que
conlleva a la autorepresión y autocontrol, sin necesidad de la
acción del régimen.
2-. El proceso de reivindicación moral
de la oposición pasa por creer que todos somos confiables hasta que
no se demuestre lo contrario. En esta iniciativa todo participante
debe abstenerse de prejuiciarse con sus prójimos, incluso a pesar de
algunas evidencias. El régimen nos ha hecho víctima del síndrome
de la desconfianza adquirida. Por tanto, tenemos que crear nuestro
propio antídoto contra la desconfianza y la descalificación.
3-.
Todas las personas, incluso partidarias del régimen son de nuestro
interés como depositarias de nuestro mensaje. Incluso, aquellos
integrantes de la falsa oposición creada por el régimen u
opositores que por varias razones se convierten o son colaboradores
del régimen también pueden ser objetivo de nuestro trabajo. De
nosotros depende cómo utilizarlos a nuestro favor y convertirlos en
opositores útiles contra el régimen.
4-. El prejuicio y la
descalificación moral de la oposición de forma general y
sistemática, ya sea como estrategia del régimen o por la
irresponsabilidad de muchos miembros de la oposición, que también
se suman a esa campaña de difamación, deja a la población en una
disyuntiva: o sigue con esta dirigencia corrupta del régimen o
apuesta por una dirigencia opositora aún más corrupta. Nuestra
iniciativa tiene como objetivo cambiar la percepción que se tiene de
la oposición de forma general.
5-.La falta de reconocimiento
de la oposición por parte de la población, se debe entre otras
cosas, a la falta de vinculación social con las masas. La oposición
cubana no tiene líderes sociales, enfrentando al régimen a partir
de las demandas sociales. Los opositores se aíslan políticamente de
la comunidad y con el surgimiento de las redes sociales de la
Internet, prefieren mantener la comunicación y relaciones con el
exterior. Hay que aprovechar las circunstancias del país y mantener
un discurso público, que la población vea nuestro liderazgo y que
somos la voz de los que ellos quisieran expresar.
6-.La
represión ha sido el control político del régimen, mediante la
persecución y el acoso contra los que denominan desafectos, sin
reconocer las causas del descontento popular. Por tanto, ante las
circunstancias actuales se tiene que invertir la pirámide de la
persecución y el acoso. Ahora hay que enfrentar a todo funcionario
público, agentes de la inteligencia, instituciones del estado,
organizaciones oficialistas, y a todos hay que pedirles cuentas y
responsabilizarlos y culparlos de todo lo malo que sucede en el país.
Por esta razón hay que masificar la oposición, no por
afiliación, sino por concepto.
7-.Todo participante en esta
iniciativa en Cuba debe hacer pública su ubicación constantemente
en las redes sociales y cualquier otra posibilidad que se le
presente. Siempre mostrando su interés por el contacto directo, al
menos con los que se encuentran en su localidad.